En la preciosa plaza de Salamanca, con menos gente de la habitual, acudió a las once y media, puntualmente Rufus para deleitar al público. La primera sorpresa fue su vestimenta: ¡un traje de torero!, con esto demostró su fama de original en la puesta en escena. También cabe destacar el perfecto sonido de la actuación.Rufus empezó el concierto aferrándose al piano y tocó rápidamente el tema principal de la película “Buscando a los Robinsons”. De inmediato pasó a la guitarra y cautivó al público con el tema “Sanssouci” seguido de “Not Ready for Love”, esta última quizás fue de las más emotivas del concierto. Luego interpretó canciones de su repertorio más clásico como “California” o “Vibrate”. El punto lo puso con la balada “Going to a town” de su último disco.
El cantante pidió perdón por quitarse la montera que llevaba sobre su cabeza y también dijo que no estaba tan gordo como para que le quedase el traje tan prieto. Con sus continuas bromas se metió al público en el bolsillo. Una anécdota fue que en la canción Sanssouci dejó al público interpretar el estribillo y al final lo único que se oyó, fue su guitarra.
El concierto iba avanzado y llegó a su final con la canción Little Sister, dedicada a todas las damas. Antes de que el público se lo pidiera, salió a dar los bises, entre los que cabe destacar “Art Teacher” y “Cigarrettes and Chocolate Milk”.
Lo que quedó claro el miércoles, es que Rufus es uno de los mejores compositores y pianistas del siglo XXI y lo más importante, el ser famoso nunca ha cambiado su alegre forma de ser.
2 comentarios:
Gracias Noé por contarnos lo que, lamentablemente, no pudimos ver.
No hay de qué. Muchas gracias por publicarlo.
Saludos.
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