3 de agosto de 2006

La premisa exacta sobre la que creí
constatar enteramente los deshaucios,
procede de un mínimo itinerario
entre las conclusiones perdidas
y los autorretratos imaginarios,
y de tan leve,
desaparece en los olvidos del tránsito
y en la materia de lo ilegible.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Saludos desde Praga. Pronto volveremos y actualizaremos el blog.